Las principales enfermedades que pueden aparecer en los gatos están relacionadas con la microflora patógena, daños en la propia almohadilla, un cuidado inadecuado de la zona de la uña o un portador de infección.
- Una de las enfermedades más comunes de las uñas de los gatos es la onicocriptosis. Se trata del agrietamiento de las uñas en toda su longitud, que se ve agravado por la microflora patógena. Si hay inflamación, es necesaria la atención veterinaria inmediata para evitar problemas mayores.
- El segundo problema es el enroscamiento de las garras hasta la base, que provoca un entumecimiento grave de las extremidades. Este problema es especialmente problemático en los gatitos jóvenes, ya que sus uñas crecen más deprisa.
- La rotura de las uñas también es un problema común entre los animales de compañía. Las causas de este fenómeno pueden ser varias, una alimentación inadecuada, una carencia de vitaminas y la falta de un cuidado normal de las uñas.
¿Por qué mi gato se muerde las uñas?
- Hongos felinos: cuando un gato se sumerge en una guerra con hongos, sus uñas a menudo se convierten en campo de batalla. El mordisqueo constante puede ser una estrategia de autodefensa del felino contra estos invasores microscópicos.
- Deficiencia de vitaminas y minerales: el menú incompleto. Un gato bien nutrido es un gato feliz. La falta de ciertas vitaminas y minerales puede llevar a que el felino busque alivio mordiendo sus uñas. Asegúrate de que tu amigo peludo tenga una dieta equilibrada.
- Traumatismos felinos: los gatos son aventureros por naturaleza, y a veces, sus travesías pueden terminar en pequeños traumatismos. Si tu gato se muerde las uñas de forma selectiva, podría ser una respuesta a molestias causadas por lesiones pasadas.
- Garras demasiado largas: las garras largas pueden ser una molestia para los gatos. Si no has realizado el corte de uñas felino adecuadamente, tu minino podría asumir la tarea por sí mismo, mordisqueando esas garras extra largas.
- Estrés felino: el estrés puede manifestarse de maneras curiosas en los gatos, y el mordisqueo de uñas es una de ellas. Si observas cambios en el comportamiento y este hábito persiste, es momento de explorar y aliviar las fuentes de estrés en la vida de tu gato.
No es extraño ver a un gato con la pata trasera en alto, dedos separados, mordiéndose las uñas con entusiasmo. Este peculiar comportamiento, ya sea en la pata trasera o delantera, es a menudo una manifestación de hábitos felinos normales. ¡monitorea y asegúrate de que el hábito no se convierta en una obsesión felina!
Si a tu gato se le salió una uña, trate la zona lesionada con un antiséptico. Lime la punta para evitar traumatizar los tejidos blandos.
Si la garra está muy dañada y se aprecia hemorragia, véndala y lleve al gato a una clínica veterinaria.
Si tu gato se arrancó una uña con un objeto afilado, aplica presión para detener el sangrado y busca asistencia veterinaria.
Uñas encarnadas
Las uñas encarnadas son más frecuentes en mascotas obesas, inactivas y ancianas. Debido a los cambios en el organismo relacionados con la edad, el metabolismo mineral se ve alterado, lo que provoca la deformación de las garras, y es menos probable que se afilen debido a que los animales no son tan activos.
A veces, la causa radica en características anatómicas hereditarias (similares a las uñas encarnadas en los humanos).
La deformación, el crecimiento anormal y las uñas encarnadas pueden indicar una infección, que también puede provocar el oscurecimiento de las uñas en la base, el deterioro del pelaje, heridas entre las yemas de los dedos y huecos en el cuerpo. El animal debe ser examinado por un veterinario lo antes posible. Las uñas afectadas se extirpan quirúrgicamente. La deformación puede estar asociada a la falta de vitaminas y minerales, traumas y daños mecánicos en la pata del gato.
El crecimiento de las uñas dentro de la piel del dedo se produce por un afilado insuficiente de las formaciones de cuernos y por un cuidado inadecuado e irregular: recorte infrecuente, acortamiento a una longitud demasiado corta.
A los gatos les crecen las uñas entre 3 y 4 semanas. En cuanto le crezcan las garras, hay que cortárselas.
Inflamación del lecho ungueal
Los principales síntomas de la inflamación del lecho ungueal son dolor, enrojecimiento e hinchazón alrededor de la uña. El gato también puede experimentar llagas, sangrado, sensibilidad extrema y dolor al acercarse a la uña. Visualmente, la uña puede parecer deformada o astillada.
Para tratar la inflamación del lecho ungueal, es esencial un cuidado adecuado de las uñas del gato. El afilado regular de las uñas puede ayudar a prevenir y reducir la posibilidad de inflamación. Para ello pueden utilizarse rascadores especializados y afilarse regularmente con pinzas o tijeras.
También son necesarios agentes antimicrobianos y cicatrizantes. Algunos dueños de gatos aplican tratamientos con alcohol o utilizan pomadas y cremas especiales para acelerar la cicatrización de las heridas. Sin embargo, antes de utilizar tales remedios, se recomienda consultar a un veterinario.
Si la inflamación del lecho ungueal es casi imposible de tratar por sí sola, se encarnan o causan dolor intenso, es necesario consultar a un veterinario.
Afilado regular y rascadores especializados son tus mejores aliados para prevenir y reducir la inflamación.
Infección por hongos
La infección por hongos en las uñas es otra odisea felina. ¡vigila los siguientes síntomas como un gato acechando a su presa!
- Cambios en el color y forma de las uñas.
- Aplastamiento, división o desprendimiento de las placas ungueales.
- Picor e inflamación del lecho ungueal, ¡la fiesta de los hongos!
- Hinchazón causada por la infección fúngica.
- Exudado del lecho ungueal, ¡como un drama de telenovela felina!
El tratamiento para esta aventura micológica incluye medicamentos antimicrobianos como los antimicóticos, ¡la espada contra los hongos! Además, un cuidado regular de las uñas es crucial para prevenir futuras invasiones. Trata las áreas afectadas y mantén el entorno felino en condiciones ideales. ¡el arte de las uñas felinas merece un escenario impecable! 🐾
Panaritium
El panaritium, una inflamación purulenta de los dedos, es como el drama de telenovela felina que nadie quiere experimentar. Las fases de desarrollo son cruciales para entender esta odisea felina.
Síntomas:
- Zona roja e hinchada alrededor de la uña, ¡una alfombra roja de problemas felinos!
- Dolor al tocar o presionar el dedo, ¡un «ouch» felino!
- Cojera aparente al caminar, una actuación teatral felina.
- Aumento de la actividad del animal, ¿dónde está el control remoto felino?
- Lamido del dedo a lo largo del día, la versión felina de los snacks entre comidas.
Estos síntomas deben tenerse en cuenta, sobre todo si persisten a lo largo de varios días. Un gato con un panaritium es como una película de suspenso que no termina.
A los gatos se les puede y s debe cortar las uñas, y a un gato bebé también.
Tratamiento:
El tratamiento del panaritium requiere cumplir con reglas esenciales para una recuperación digna de gato estrella.
Pasos terapéuticos con elegancia felina:
- Ablandar los dedos mediante un baño de agua tibia, porque los gatos merecen un spa.
- Utilizar un cepillo duro para eliminar la suciedad y los hongos, ¡una sesión de belleza felina!
- Aplicar yodo con la precisión de un gato cazador.
- Proporcionar un lecho adecuado, porque un felino herido merece comodidad real.
- Además, analgesia felina si el dolor decide ser protagonista.
Es esencial vigilar el proceso de tratamiento y seguir todos los requisitos para una curación rápida. Porque un gato bien cuidado es un gato feliz y saludable. ¡hasta las uñas felinas necesitan mimos y atención! 🐱✨